Catedral de Estrasburgo

La apariencia de una de las catedrales más importantes de Europa se ha visto transformada por un nuevo diseño de iluminación extraordinario que cuenta con 400 luminarias de Lumenpulse.

La nueva iluminación fue creada por el diseñador L'Acte Lumière, que trabajó en conjunto con los contratistas eléctricos de Citeos, los ingenieros de Lollier y los arquitectos especializados en conservación de JCBA. Su diseño intenta desplegar el esplendor de la arquitectura gótica: los colores distintivos de la piedra arenisca, su compleja mampostería y su increíble altura. Una característica importante de la iluminación es posible gracias a la tecnología Dynamic White de Lumenpulse que cuenta con la capacidad para ajustar la temperatura del color de cada luminaria a fin de combinar con precisión los colores de la mampostería.

Las luminarias se encienden gradualmente al atardecer, destacando cada capa sucesiva de la arquitectura con luz que se torna más cálida hacia el centro. Luego de las 10 p. m., la iluminación cambia para dar una visión más unificada de todo el edificio en su punto más alto. Después de la 1 a. m., solo se ilumina la parte superior de la catedral, minimizando así la contaminación lumínica en los edificios adyacentes.

El proyecto se llevó a cabo con aproximadamente 400 luminarias Lumenbeam y Lumenfacade más pequeñas ubicadas de manera meticulosa fuera del alcance la de vista dentro de la estructura. Muchas de las luminarias también se pintaron de forma personalizada para disminuir su visibilidad. Además, se utilizaron 30 proyectores XLarge Lumenbeam para iluminar el edificio desde ciertos puntos estratégicos seleccionados alrededor de la catedral.

El diseño debía equilibrar los numerosos requerimientos mientras consideraba la función de la iglesia como lugar de oración y emblema cultural, además de otros retos como la conservación arquitectónica, la eficiencia en el uso de la energía y el mantenimiento.